Argumento y claves de Cicatriz
Cicatriz, novela contemporánea publicada en 2015 por Anagrama, recibió el Premio Ojo Crítico de narrativa ese mismo año. La historia desarrolla la relación entre Sonia, una joven solitaria y con inseguridades, y Knut, un hombre con el que establece un vínculo epistolar que poco a poco se convierte en una obsesión absorbente. Ya desde el inicio de la historia, Knut agasaja a Sonia con libros y otros regalos caros que roba para ella como acto de rebeldía. Sonia se muestra vulnerable, atrapada en una dinámica que al principio parece un refugio, pero que pronto se transforma en una red de dependencia. Knut, por su parte, encarna el poder de la manipulación, disfrazado bajo una aparente generosidad. A través de cartas y mensajes, Sara Mesa construye un relato inquietante donde se mezclan deseo y manipulación.
Se trata de una de esas novelas que incomodan, que obligan al lector a entrar en un terreno resbaladizo donde la frontera entre lo íntimo y lo tóxico se desdibuja. Evita los lugares comunes: no hay víctima ni verdugo en términos absolutos, sino un terreno gris en el que consentimiento y coacción se entrelazan. El título, Cicatriz, funciona como símbolo de esa huella que deja una herida que nunca termina de cerrarse.
Estilo y atmósfera: la incomodidad como motor narrativo
El estilo de Sara Mesa es sobrio y preciso, con frases cortas y una prosa limpia que potencia la tensión psicológica. Su fuerza radica en lo implícito: lo que no se dice pesa tanto como lo que se confiesa. La novela se lee con desasosiego, con la sensación de que algo turbio se está gestando en cada página.
Aquí está uno de los grandes aciertos de Mesa: no juzga a sus personajes ni ofrece una moraleja explícita. Lo que tenemos es la voz de los personajes desnuda, con sus contradicciones, silencios y vacilaciones. El lector debe enfrentarse a la ambigüedad de una relación perturbadora que, sin embargo, resulta verosímil.
Comparación con otras novelas de la autora: una obra valiosa, aunque no la mejor
Aunque considero que Cicatriz es una novela potente y arriesgada, no me parece la más redonda de la autora. En Un amor, Sara Mesa logra un equilibrio más sólido entre trama, atmósfera y complejidad psicológica. Allí, la carga simbólica es más fuerte y la voz narrativa está más lograda.
Esto no significa que Cicatriz sea una obra menor, sino que ocupa un lugar distinto en la trayectoria de Mesa: más experimental, más arriesgada en la forma (que no en el contenido), pero quizá menos lograda en el conjunto. La recomendaría sin duda, sobre todo porque plantea preguntas incómodas sobre el deseo, el poder y la fragilidad humana, pero si alguien me preguntara por dónde empezar a leer a Sara Mesa, yo le diría que lo hiciera por Un amor. Después, Cicatriz se aprecia mejor como parte de una obra en crecimiento, con constantes y obsesiones propias.
Veredicto
Cicatriz confirma a Sara Mesa como una autora con una mirada única, capaz de explorar lo sórdido sin caer en lo obvio. Es una novela valiosa, perturbadora y genuina, aunque, en mi experiencia personal como lectora, no alcanza la brillantez de otras de sus obras. Le doy cuatro estrellas.

Sara Mesa
Sara Mesa (Madrid, 1976) es una escritora española afincada en Sevilla. Su obra narrativa, caracterizada por un estilo conciso y por el interés en las zonas oscuras de las relaciones humanas, la ha consolidado como una de las voces más relevantes de la literatura contemporánea en español. Ha publicado otras novelas como Cuatro por cuatro (finalista del Premio Herralde 2012), Cara de pan, Un amor y La familia. También ha incursionado en la narrativa breve y el ensayo. Su literatura indaga en el poder, la incomunicación y la fragilidad, con un lenguaje sobrio y una mirada incisiva.
Patricia, he leído Cicatriz y Un amor y tienes razón, es mejor Un amor, aunque Cicatriz también es una gran novela.
¡Estoy de acuerdo! 🙂